No lo llame el cielo
Y no le quitan la tierra!
Noche, toda la oscuridad y el incienso,
ruiseñores más fuerte silbido,
Todo el infinito, mnogotonney
Murmuring jet invisible…
Para la cubierta de tilo
brilló, desaparecido… Aquí vamos de nuevo…
Y en la luz de la luna corrió
Camino de la sombra de su revoloteo…
En una noche así, me las arreglé para aprender,
En el sonido de la noche y la primavera,
Los brazos de una mujer hermosa
En los rayos de la luna sin vida.
23 enero 1899
San Petersburgo