Deja que me quema y el alma,
la vida instantáneo a triunfo
Y los sueños solitarios
En su regocijan inmortalidad.
usted es incomparable, Usted - la diosa,
Su alegría y la tristeza -
Mi santuario acariciado,
Mi distancia profética.
Deja que me quema el alma
Y el sueño de llama de fuego,
Pensar siempre delante de mí
Sus características celestes.
15 octubre (?) 1900